miércoles



 


10 CONSEJOS PARA SACAR PARTIDO A LA TELEVISIÓN

Cuando comienzan nuestros hijos el colegio, la vida ordinaria vuelve a imponerse. El inicio del curso escolar y el final de las vacaciones estivales condicionan a muchas familias a retornar a la actividad laboral y escolar. Se instauran los horarios, la organización del tiempo libre y del descanso al finalizar la jornada.

En la organización de este tiempo libre tiene un lugar muy destacado la televisión. Así decía,
Mercedes Álvarez, la autora del libro: Cómo sacar partido a la
televisión, que “Lo queramos o no, la televisión ya forma parte, desde hace mucho tiempo, de nuestro mundo y de nuestras vidas, y para que no se adueñe de éstas, lo más sensato es aprender a sacarle partido”.

Ahora que el mal tiempo nos va impedir hacer planes de familia al aire libre y que retomamos los hábitos del curso escolar, es bueno no perder de vista algunos consejos que dan especialistas y orientadores que, aunque todos conocemos, es conveniente refrescar de vez en cuando.

1.- No debemos dejar a los niños solos ante la televisión. No se debe tener a la televisión como una "niñera electrónica".

2.- Tenemos que impedir que se encienda el televisor cuando los niños quieran. Debemos acotar a nuestros hijos el tiempo dedicado a este medio.

3.- Enseñar a los hijos a que no hay que “ver televisión”, sino que hay que ver programas de televisión.

4.- Un buen modo de afirmar las ideas anteriores, es no tener a mano el mando a distancia. El “zapping”, o la costumbre de cambiar permanentemente de canal de televisión, es contrario al criterio de selección.

5.- No es conveniente que nuestros hijos tengan un aparato de televisión en su habitación. Este hecho hace muy difícil que conozcamos los programas que ven, la selección que realizan y el tiempo que invierten en la pantalla.

6.- No todos los programas dan lo mismo. Los padres debemos dar a nuestros hijos unas pautas sobre los contenidos televisivos, sobre los valores o contravalores que ofrecen determinados programas.

7.- No conviene dar por sentado que todos los programas llamados “infantiles” tienen un contenido adecuado.

8.-La capacidad de imitación que tiene el niño debe de ser orientada hacia el conocimiento de personajes reales y ejemplares y no hacia “héroes de ficción” o personajes de poca ejemplaridad.

9.- El ejemplo es vital. Si los padres ven mucha televisión, o televisión de mala calidad, ¿con qué criterio vamos a evitar que nuestros hijos vean aquellos programas negativos para ellos?.

10.- Dialogar con nuestros hijos sobre los contenidos emitidos en televisión. Es una buena forma de educar en valores, reflexionar juntos y entablar una conversación interesante sobre sus gustos, preferencias y actitudes respecto a lo visto.
FUENTE: Carmen de Andrés. ESCUELA DE FAMILIA

jueves

Si las familias dejan de cumplir eficazmente la función de colocar a nuestros niños en condiciones de transitar con seguridad el camino de la vida, ¿qué vamos a hacer? Una mirada más cuidadosa sobre los mecanismos de problemas específicos sugiere que en los déficits establecidos de aptitudes emocionales o sociales se encuentran los cimientos de problemas graves, y que los correctivos o preventivos bien orientados son capaces de lograr que más chicos puedan mantenerse en la buena senda. "


“Converse con su hijo
Pídale a su hijo que le cuente acerca de su día en la escuela. Motívelo a que le explique algo que hizo, o a qué jugó durante el recreo.

Diga trabalenguas divertidos
Cante canciones, lea libros de rimas y diga trabalenguas divertidos. Estos ayudan a que los niños se vuelvan sensibles a los diferentes sonidos q ue contienen las palabras.

Viva lo que lean
Conecte lo que su hijo lee con lo que sucede en la vida cotidiana. Si leen un libro acerca de animales, relaciónelo con los animales que uno ve en el campo, en una granja, o en una visita al zoológico.

Use el nombre de su hijo o hija
Señale la conexión entre las palabras y sonidos. Diga algo como: "Juan, la palabra juega empieza con el mismo sonido que tu nombre. Juan y juega, ambas palabras empiezan con la letra J."

Juegue con títeres
Juegue con títeres. Haga que el títere diga, "Mi nombre es Marcos. Me gustan las palabras que riman con mi nombre. ¿Acaso barcos rima con Marcos? ¿Acaso árbol rima con Marcos?"

Trace y diga las letras
Haga que su hijo, o hija, use su dedo para trazar la letra mientras hace el sonido de la letra. Haga esto en una hoja de papel, en arena o en un plato con azúcar.

Escríbalo
Tenga papel y lápiz y a la mano para que su hijo escriba. Escriban juntos uno o dos enunciados de algo especial. Motive a su hijo a usar las letras y sonidos que esté aprendiendo en la escuela.

Juegue juegos de sonidos
Intente mezclar sonidos con letras. Pregunte "¿Puedes adivinar cual es esta palabra? m - a - n - o." Haga cada sonido más largo de lo normal.

Lea una y otra vez
¡Adelante, léale a su hijo su libro favorito mil veces! Mientras lee, haga pausas y pregúntele a su hijo que está pasando en el libro. “

Qué pueden hacer los padres: Consejos de lectura de los niños

Los padres pueden motivar la lectura haciendo que los niños escojan los libros y creando una ocasión familiar memorable de la actividad de lectura. Entérese qué dicen los niños sobres estas pautas para padres para aumentar la motivación.
A continuación presentamos algunas pautas,  sobre cómo motivar a los niños a leer, con comentarios y sugerencias de los mismos niños.

Deje que los niños escojan sus propios libros

La elección de los libros es una gran motivación para los lectores grandes y pequeños. Deje que los niños escojan libros de la biblioteca o la librería. Es casi seguro que querrán leerlos. Si los elige usted, no querrán leerlos.
"Deje que los niños escojan lo que les interese a ellos. Cuando era pequeño, siempre elegía libros de dinosaurios. Mi papá me los leía. Escogía cualquier libro y él lo leía, sin importar lo difícil que fuera," cuenta Brian.

Fije objetivos y recompense la lectura

Recompense la lectura con más lectura; es lo que decimos siempre. Visite la biblioteca o librería para conseguir el libro siguiente de la serie preferida de su hijo. O deje que su hijo lo compre en Internet. La mayoría de los niños están de acuerdo, y no encuentran mayor problema con recibir más… recompensas, aunque sean externas.
"Recorra la ciudad y busque concursos como los que suele haber en las bibliotecas: si lee un cierto número de libros, recibe una recompensa. O bien, invente su propio concurso," propone Vincent. "Si a su hijo le gusta el helado, cada vez que termina de leer, digamos, dos capítulos de un libro, por lo menos cien páginas, llévelo a comer un helado."

Que sus hijos vean cómo usted lee

Lea el periódico mientras bebe el café por la mañana, tome una revista mientras espera en el consultorio del médico y lleve un libro de bolsillo en su cartera o maletín. Sus hijos captarán el mensaje de que a usted le gusta leer durante su tiempo libre.
"Si los padres no leen mucho delante de sus hijos y dedican mucho tiempo a los aparatos electrónicos, como la TV y la computadora, pensarán que eso es lo que deben hacer y es posible que no lean mucho", dice Cameron.

Haga de la lectura una actividad divertida y memorable

Los padres pueden transmitir importantes mensajes positivos sobre la lectura al proponer actividades que resulten una experiencia que sus hijos recordarán y atesorarán.
Emily cuenta: "A mi mamá le gusta mucho leerme y hace que los libros suenen divertidos porque usa distintas voces".
Lo importante no es lo que le lea a sus hijos; es cómo lo lea. Déle vida a un cuento cambiando las voces y el ritmo, o usando efectos de sonido y movimientos.
"Para mí, no se trataba sólo de los libros, era cómo mi mamá me leía y captaba mi atención," dice Brittany.

Asocie los libros y la lectura con una experiencia afectuosa

Leer juntos es un momento para el acercamiento y la demostración de cariño; otra manera de demostrar su amor como padres, abuelos o adultos afectuosos.
"Mi mama escribía notas mágicas de Papá Noel o el ratón Pérez, y las "descubría" y leía conmigo en la mañana. Para mí saber que se había tomado el tiempo de hacer eso era la recompensa más tierna," cuenta Brittany.
Luis dice: "Viene mi abuela y quiero que me lea".
Para los niños que tienen la suerte de tener padres que les lean, el recuerdo es duradero y su amor por los libros y la lectura perdura toda la vida.
"Principalmente, lean a la antigua. Abracen a su hijo mientras leen. Uno de mis recuerdos más preciados es cuando mi mamá me leía a la noche en la cama y me quedaba dormido en sus brazos. Esas noches dormía profundamente,"cuentan escritores hoy reconocidos por sus obras.

¡Ayudando a los niños a leer … y a triunfar! CONSEJOS PARA los padres de niños en el Primer Ciclo de Primaria

¡Ayudando a los niños a leer … y a triunfar!
No salga de su casa sin algo para leer
Traiga consigo un libro o revista para cada vez
que su hijo o hija tenga que esperar, como en
una visita al doctor. Siempre trate de encontrar
tiempo para la lectura.
Una vez no es suficiente
Motive a que su hijo vuelva a leer sus libros
y poemas favoritos. El volver a leer las cosas
ayuda a los niños a leer mejor y más rápido.
Profundice sobre el argumento
Pregúntele a su hijo cosas sobre el cuento que
acaban de leer. Diga algo como: “¿Por qué crees
que Clifford hizo eso?”
Controle la televisión
Es difícil que la lectura compita contra la televisión
y los juegos de video. Por ello es necesario
que motive la lectura como una actividad para
“los ratos libres.”
Sea paciente
Cuando sus hijos estén tratando de leer una
palabra, déles tiempo para que lo hagan.
Recuérdele mirar con atención la primera o
primeras letras de la palabra.
Seleccione libros del nivel correcto
Ayude a que su hijo no seleccione libros que sean
demasiado difíciles. El objetivo es darle muchas
experiencias exitosas en la lectura.
Juegue juegos de palabras
Haga que sus hijos repitan los diferentes sonidos
de palabras similares como
bote y lote; ratón y
botón;
o poco y loco.
Yo lo leo y luego tú lo lees
Tome turnos leyendo en voz alta a la hora
de dormir. Los niños disfrutan de momentos
especiales con sus papás.
Corrija gentilmente al joven lector
Cuando su hijo cometa algún error, gentilmente
señale la letra o letras que omitió o que leyó
incorrectamente. Muchos lectores principiantes
tratarán de adivinar la palabra basados en la
primera letra.
¡Hable, hable, hable!
Hable con su hijo todos los días sobre la escuela
y cosas de la casa. Use algunas palabras
interesantes durante la conversación y recuérdele
palabras que ya utilizaron en el pasado para
que las aprenda y recuerde mejor.
¡Escriba, escriba, escriba!
Pídale a su hijo que le ayude a escribir la lista del
supermercado, una nota para Abuelita o un
diario de las cosas especiales que suceden en
casa. Cuando esté escribiendo, trate que su hijo
escriba las letras y sonidos que está aprendiendo
en la escuela.

Déle a sus hijos oportunidades para leer en voz alta. ¡Inspire a sus hijos a que
lean todos los días! Los siguientes consejos le ofrecen maneras divertidas para
ayudar a que sus hijos se conviertan lectores seguros y contentos. Intente
diferentes consejos cada semana y vea cuales funcionan mejor.

¿ Cómo aprender con un cuento?


El Valor de un Cuento

¿Cómo aprender con un cuento?


Los cuentos, los relatos, las novelas, los libros en general, han sido siempre un vehículo privilegiado para la transmisión de actitudes y valores. Consiguen poner en movimiento la imaginación, el pensamiento y el diálogo además de constituir una divertida alternativa de ocio.
Como dice el escritor Mario Vargas Llosa: “La lectura no es solamente embarcarse en ese mundo de fantasía. Es que de ese mundo regresas armado con toda clase de preguntas, de dudas, de críticas, de sueños y de designios que transforman totalmente tu conducta en el mundo real. Nada enriquece tanto los sentidos, la sensibilidad, los deseos humanos como la lectura.”
Los libros abren al niño y adolescente un amplio abanico de posibilidades. A través de ellos, pueden experimentar cosas, conocer mundos nuevos, practicar a través de los distintos personajes habilidades para la vida, escapar por unos instantes de la rutina, tomar prestadas distintas identidades, superar miedos, expresar sentimientos, vivir por unos instantes en otras culturas, y un sinfín de cosas más. Con las palabras se tejen historias, y los niños y adultos necesitamos historias para poder vivir otras vidas, para poder compararnos, para escapar momentáneamente del mundo en el que vivimos, en resumen para aprender con un libro.
La lectura también ayuda a enriquecer el vocabulario del que lee, conocer precozmente las estructuras narrativas, mejorar la capacidad de expresión y comprensión, además de fomentar el deseo por leer.
Se considera la lectura precisa para la salud individual y colectiva porque:
AUMENTA LA CREATIVIDAD
Los lectores estimulan su imaginación y creatividad como un proceso natural, intrínseco, a la acción de leer; creatividad necesaria para afrontar situaciones, para resolver conflictos, para tomar decisiones, etc.
FAVORECE POSICIONES ACTIVAS
La lectura implica una motivación e interés del sujeto que lee. Leer requiere estar activo y dejar de ser un mero receptor pasivo de estímulos externos.
ENSEÑA EXPERIENCIAS
Permite que el sujeto, a través de la identificación con los personajes, interiorice actitudes y comportamientos que aumentan sus recursos operativos.
FAVORECE LA CAPACIDAD DE CRÍTICA
Las personas que leen incorporan una dimensión de juicio, cada vez más autónomo y libre, condición indispensable para la vida.
ES EN SÍ MISMA UNA ACTIVIDAD DE OCIO Y TIEMPO LIBRE
Es una actividad alternativa al repertorio consumista, enriqueciendo las posibilidades y opciones vitales.
Si, además, la lectura se plantea sobre temas previamente seleccionados, que combinen contenido educativo e interés, se redobla su potencial, llegando a convertirse en una herramienta extraordinaria para fomentar valores y actitudes prosociales y para facilitar la identificación y el reconocimiento de habilidades imprescindibles para afrontar situaciones críticas.